Viernes creativo: escribe una historia

¿Escribimos una historia para Lilac Wine, un video de Yevtam? Déjate guiar por alguna de sus sugerentes imágenes para disparar tu imaginación.

Te invito a dejar tu historia en un comentario en esta entrada, en facebook, en google+, en twitter, en tu blog o donde quieras, el asunto es escribir.

29 pensamientos en “Viernes creativo: escribe una historia

  1. Todas las líneas, pequeños caminos de la imaginación, me conducen a ti, nos atan, nos aprisionan, nos acercan a un mar de poesías entre los pestañeos de tus ojos, sí, los tuyos, los mismos que me recorren hasta estas palabras, hasta aquí.

  2. VIAJE A LA LUZ.

    No me cabe duda que partiste hacia la luz y que en tu camino te irás transformando en la libertad del vuelo, la ligereza de los juncos mecidos por el viento, la alegría del trino, el aroma de una flor, la ingravidez de un pez globo, el polvillo mágico de la mariposa o la elegancia del pavo real hasta llegar a la estrella que te ha correspondido, desde donde seguirás iluminándonos con tu incandescente sonrisa.

  3. VOLÁTIL

    En la tinta oscura de tu mente se desperezan aves silenciosas y mariposas de huracanes, peligros empantanados, crines de libertad. En el trazo fino de tu imaginación cobran forma las manos cálidas que acunan y acarician, las miradas que estremecen, las lágrimas que se empeñan en no secar. En la cursiva de tus sueños se camuflan bosques de cadáveres en pie, pétalos con forma de nostalgias, noches de luna llena y serenatas desafinadas al oído.
    Es por esto que siempre me enternece verte con la frente derramada, con el pecho salpicado, con las manos rebasadas. Porque en la letra chica de tus dedos se agazapa el mundo. Y también, muchas veces, se destruye. Afortunadamente.

      • Muchísimas gracias, Elena. Me alegra mucho que te guste, y que veas entre estas palabras tantas bellas metáforas… ¡Qué hermoso tu comentario! Un abrazo fuerte.

  4. Origami

    Estoy viviendo la primavera perpetua desde diciembre, cuando en el alféizar de mi ventana se posaron palomas de papel que me susurraban «ábreme, ábreme». Contenían las figuras papirofléxicas versos apasionados, escritos con una caligrafía de otros mundos. El hecho insólito, que me desveló esa primera noche, se repitió madrugada tras madrugada, sin que pudiera identificar de dónde provenían. Tan solo me quedaba disfrutar, y era mucho, de las lecturas poéticas de los mensajes. He de reconocer que, desde entonces, mi vida giró en torno a esas palomas de papel que me devolvieron la ilusión y las mariposas al estómago, a pesar de que en ningún momento leí mi nombre ni dejaron pista alguna de su autora, porque sí, en este caso creo fervientemente que Dios era una mujer. Pero en enero, como llegaron, se olvidaron de mí y, sin explicación, divisé su vuelo migratorio en la inmensidad del cielo y cesaron sus visitas bajo las estrellas. Lloré durante tres días seguidos, también cuando el sueño me vencía, hasta que la desesperación, tuvo que ser, me levantó de mi cama, me sacudió la escarcha que me recubría y me sentó a escribir versos de amor, que sí firmé y que doblé en forma de avión, para que volasen en busca de la bandada lírica que me había robado el corazón. Jamás han regresado a mi ventana las mensajeras del querer, ni falta que hace, pues una semana después, mi vecina llamó a mi puerta y, con una botella de vino, un libro de poemas y un manual de papiroflexia, me enamoró. Y juro que desde esa noche llueven margaritas doradas y los jilgueros pian baladas románticas en nuestro nido de amor.

    • Hermoso, Nico, hermoso. Me encanta esa esperanza después de la desilusión, ese amor después de la espera. Yo todavía espero que la desesperación me sacuda la escarcha. Mientras tanto, te leo. Un abrazo fuerte desde esta orilla.

      • Caro, no soy quiromante ni adivino, ni tan siquiera dispongo de la vista en regla, llevo gafas desde pequeñito, pero eso no evita para que te diga que en breve, antes de lo que tú te crees, te sacudirás la escarcha y volverás a vivir tu ilusión. Ya me contarás. ya. Bss.

    • La ilusión recobrada. Hay vecinas que se saben comportar. Me ha gustado mucho este relato. Muy tierno, bien llevado hasta el final-

  5. El bibliotecario

    Liba las palabras como el colibrí lo hace con el néctar de las más exquisitas flores. Las ensaliva para deglutirlas. Almacena en sus estantes cada libro que cae en sus manos poniendo al alcance de sus ojos los más preciados, aquellos a los que vuelve una y otra vez buscando el sentido a la vida. Sabe que en este o en aquél se encuentra la respuesta para cada momento. La frase perfecta con la que rebatir los argumentos de aquellos que no entienden . Sabe donde están las comas, los silencios, la música que acompaña cada historia y donde los puntos finales. Se siente afortunado, vive muchas vidas. Todas las vidas que no podría a vivir.

  6. Jaulas de papel

    Todo está relacionado. Ayer fui pájaro, mañana seré flor, hoy soy mujer. Y todo forma parte de algo que aún desconozco. Y de lo único que estoy segura es de que siempre, en cada vida, en cada reencarnación, te he estado buscando. Y que sigo sin encontrarte.

  7. Soledad
    Embriagada en tu vino de amor, escuchando el revolotear de alocadas mariposas, recordando cómo te amaba, sin reservas, escrúpulos o decoro, en esta soledad que no es más que un sin vivir, muriendo.

  8. Enredados
    Si me dejo llevar por mi imaginación, puedo ser el más ligero pez, la más hermosa ave.
    Floto, vuelo, me enredo entre tu pelo, respiro tu aire, bailo con tu danza.
    Me atraes, tanto, que formo parte de ti. Otras veces me escurro entre tus dedos como si agua fuera.
    Pero vuelvo. Y tú estás ahí esperando.
    ¿O soy yo quien vuelve porque tú me enredas, y sueltas un poquito de cuerda, tirando después para llevarme a ti?
    Sea como fuere, me gusta este ir y venir.
    Me enredas… me suelto. Me sueltas… me enredo.

  9. Los ojos de la hechicera

    La hechicera me dice que la mire a los ojos, y que me deje llevar por ella a un viaje mágico. No tengo fuerzas para oponerme, es dueña de mi voluntad.
    Un caballo se asoma a la inmensidad de la noche estrellada, y es difícil imaginar qué estará pensando. Yo pienso por él que más allá hay mucho de lo que sabemos muy poco, y el noble animal comparte con nosotros esa ignorancia. Como las aves que vuelan surcando el aire, o los peces que nadan infatigables en las aguas.
    La existencia conlleva misterios; los del universo, inalcanzables; el misterio en la mirada de una mujer, mucho más cercano, pero no por eso menos intrigante.
    El caballo continúa ahí, contemplando las estrellas infinitas, y yo estoy de regreso. Los ojos de la hechicera aún siguen frente a mí.

  10. El «Todo» que surge de la Nada.

    Cada una de las notas que componen la música de la vida guardan su propio significado y belleza. En ocasiones visibles y en otras ocultas en turbio fango. Como la lágrima que brota de lo más profundo del corazón suplicando una respuesta, comprensión o amor, ésta puede volver a renacer convirtiendo el dolor más intenso en la esperanza más brillante y cegadora que es capaz de desplazar a un universo entero de adversidades por un solo propósito, por muy insignificante que este sea.
    Es el poder de la existencia, de la naturaleza de lo creado, de lo escrito y dibujado sobre un papel en blanco. Floreciendo la vida de la nada, y es por ello por lo que merece la pena caminar nuestro propios pasos en el tiempo del que disponemos para experimentar cada una de las sensaciones que nos invita a quedarnos en este mundo donde ,aún rodeados de desgracias, una única pincelada de motivación y apoyo es capaz de provocar una de las explosiones más importantes que existen. El de la emociones. Infinitas y variables como lo son las maneras de vivir de las personas en este pequeño planeta y que aunque el hombre se empeña en destruir incansablemente, éste despliega una y otra vez su indudable fortaleza mostrándole sus verdaderas raíces profundas y mucho más poderosas de los que muchos se aferran en creer. Todo tiene su propio significado incluso aquellas cosas que parecen puestas al azar aparentemente inservibles cumplen funciones de vital importancia para la preservación de nuestro «Todo».

  11. Tinta

    Cuando la luna se elevó en el cielo los sorprendió fundidos en uno. Él deslizaba los dedos sobre el lienzo de su piel en sinuoso paisaje, mientras ella, discípula de Sherezade, iba desgranando una y mil historias.
    Al amanecer, los trazos que habían dibujado esa noche se convirtieron en nubes.

  12. En el revuelo

    Elegía un lápiz cualquiera y, como rayos cósmicos sobre una cámara de niebla, las cosas más increíbles se hacían visibles en el aire. Si conseguía olvidar todo lo demás y dibujaba y dibujaba y dibujaba, se alcanzaba a ver la mano ausente.

  13. El paraíso aburrido

    Creyó que todos los bosques eran iguales, enmarañados hasta llegar al fin. Un día, siguiendo los arabescos de la tramontana, levantó los ojos al cielo. Hoy, el diseño de sus alas sigue expuesto en la escuela de la ciudad. Les recuerda a las jóvenes aprendizas, más que a los chicos, que la curiosidad de Eva dejó perplejo a su mismo dios.

  14. Notas

    Con un solo gesto haces brotar la Primavera en mi andrajoso esqueleto, flores entre la artritis emocional de mis huesos. La exuberancia de la cola del pavo real en medio de la cripta. Atrapado en la fingida armonía de tu ancestral pentagrama, sembrado de tus fusas y semifusas, tus pestañas rizadas en clave de sol. Me aferro inútilmente a la línea del Mi mientras estiras de ese hilo que me arrastra a través de tus noches. Como un Jonás cualquiera devorado por la ballena. Abro insensato la puerta al caballo de trolla de tus besos. Adagio de luna, Black Orpheus, minha linda. El latido del tambor. Tu esencia en cada gota de rocío, colgando de las hojas de la prisión de bambú que son tus piernas; recolectadas, una a una, por el hacendoso colibrí que me vuelves en tu sueño.

  15. TIMIDEZ
    Te veo venir con un porte de pavo real y en tus ojos descubro un bosque donde anidan pájaros de luces, veo un lago en el que nadan peces transparentes y abreva el unicornio, mientras danzan las estrellas en el negro firmamento. Cuando te acercas, de mi estómago escapan mariposas para irse a adornar tu pelo y al pasar por mi lado te convierte en arco iris, que se roba todos mis colores.

  16. Ave Fénix
    Te vas. Pero no quiero despedirme. Prefiero creerte como el ave fénix y pensar que renacerás de tus cenizas. Entonces te estaré esperando.Te esperaremos todos detrás de las flores, entre las líneas de nuestros nombres, en el canto orgulloso del pavo real del parque. .. Te vas. Y no quiero despedirme. Nos encontraremos de nuevo; justo donde nos dejas, tras las plumas del fénix, siguiendo el «ejército de luz» de tu brillante estela.

¿Qué opinas?