Viernes creativo: escribe una historia

¿Te atreves a escribir una historia para este video de Davy y Kristin McGuire?

No se trata de que cuentes lo que pasa en este video, sino de que nos digas lo que te inspira. Sé imaginativo, no caigas en los clichés.

Te invito a dejar tu historia en un comentario en esta entrada, en facebook, en google+, en twitter, en tu blog o donde quieras, el asunto es escribir.

84 pensamientos en “Viernes creativo: escribe una historia

  1. Caminos de vuelta

    A veces se nos escapa la vida. Se abre un resquicio en alguna parte de nuestro cuerpo y por ahí avanza hacia otro lugar, nos abandona, busca entre las rendijas de la casa, sale por la puerta, camina por las calles, por las aceras solitarias, juega con los árboles o rueda bajo los coches. La vida puede estar en cualquier sitio, no siempre aquí, con nosotros. O eso dicen los muertos.

  2. Insomnio del alma

    Recorre el alma los rincones oscuros de la ciudad. Derramándose en los charcos de luz que forman las farolas, despertando ecos en los callejones sin salida y buscando un refugio para sus noches de insomnio.
    Dejará escapar suspiros que se confundan con esos neones que alumbran desengaños y felicidades de alquiler. Deambulará sobre las horas nocturnas, alrededor de las sobras en compra y venta, sobre las luces sacadas a subasta.
    Volverá al alba, cansada de perseguir oscuridades que acabarán desvanecidas. Y como siempre, habrá perseguido sueños buscando en lugares equivocados.

  3. Estertores

    Ella también ha escalado el pretil, ha mirado al vacío y ha cerrado los ojos. Después ha pedido prestadas las palabras que nunca supo hilvanar si no era en su boca, las ha paseado por lo de ambos y ha tardado setenta y un segundos exactos en dejar que se marchara para siempre.

  4. Mi abuela nos quiere tanto que nos acompaña adonde quiera que vamos. Por más que le decimos, se niega a quedarse en su sitio. Su presencia la puedes mirar en noches de lluvia, como un reflejo lento de las luces en las aceras que nos sigue. En noches silenciosas, le gusta romper el silencio con las notas que le saca al desvencijado piano del desván. Entonces, ella toda se convierte en vida de luces, armonías y colores.

  5. Cuando este corazón negro y vacío duerme, llora lágrimas vestidas de todos aquellos colores que me regalaste en vida. Y por un momento, resucitas.
    Sólo sigo viviendo, por seguirte soñando.

  6. Te lloro. Pena líquida se filtra a través de mis párpados cerrados. Si puediese convertir el agua salada en un poderoso lazo que se enredara en tu cuello, que atara tus manos como el grillete del condenado y la pena máxima fuese amarrarte a mi alma para siempre, obligarte de por vida a que me ames. Que me ames sin rutina que desgaste, sin cuentas ni mensajes telefónicos, sin que hay para cenar o la taza de café desierta de las huellas de tus labios.
    Lágrimas de dicha mojando tu cara somnolienta. Agua mansa reflejando nuestras caras sonrientes. Los dos retornando al agua primigenia, amándonos antes de ver la luz del mundo, antes del primer berrido. Volver a nacer destinados para amarnos, sin escape, sin otra función en el planeta.
    Pero es tarde. Sos una planta seca, tu verdor se pudrió sepultado por tanta lágrima vertida sobre tus vísceras. Y ya no queda agua en mi interior.

  7. Lugares comunes

    Recorro los lugares comunes que nos atan. Tu lado vacío de la cama. Tus zapatos arrinconados en un lugar del armario, esperando, huérfanos, tus pies descalzos. Tus fotos, el ramo de flores seco que me niego a tirar, pese a que sus pétalos se desparraman, oxidados, sobre la mesa. Salgo por la ventana hacia la avenida donde, agarrados de la mano, paseábamos nuestro amor de quinceañeros descalzos y en silencio, viviendo de besos y miradas. Recorro las callejuelas escondidas, esas donde las manos no paraban hasta quedar saciadas, y después de un breve descanso, apenas un suspiro, volver a las andadas. Recorro tus labios, tus ojos, tus manos, tus te quiero que parecían eternos y que se me clavaban como puñales. Todo me lleva hasta ti de nuevo, todo. Y, sin embargo, se que ya no queda nada.

  8. Me voy a dormir, cada noche, con ese cansancio de encontrar tus sombras cosidas en todos los rincones. Los externos y los internos. Tus besos y tu perfume, postrados desde hace meses en la otra almohada, me succionan la vida que conservo por inercia.
    Grito eclipses, me aferro a tu ausencia y lloro en silencio, condenando a mis lágrimas al exilio de sus retinas, deseándolas en la patria de tus manos efímeras.

  9. Colores
    Nanny nos ha dicho que mañana soplará una brisa, de color verde. Que se nos meterá por los pies, para hacernos cosquillas y nos dará la risa, de color rojo. Que subirá hasta hincharnos las mejillas, de color rosa. Luego nos pondrá a girar como peonzas locas, de color azul. Y cuando estemos muy, pero muy cansados, se marchará y nos dejara desinflados como globitos de color blanco. Entonces, sólo entonces, volverá el silencio, de color negro.

  10. FURTIVOS

    Da igual que sea lunes, jueves o fiesta de guardar, desde que prendió la chispa entre los dos, cada noche lanza un suspiro. Un suspiro que araña las paredes, se escapa por la ventana y vuela junto a la luna hasta que se posa en él a centenares de kilómetros. El suspiro, como si fuese ella, recorre suavemente su cabeza, sopla sus orejas, acaricia su pecho, le besa en los labios con sabor a miel y se introduce en su ser para susurrarle que las distancias no son tan grandes. Entonces, él, después de saborearlo con deleite pecaminoso, le contesta con otro suspiro ahogado en llanto que vierte entre las nubes. Cuando le llega a ella, lo acoge con tristeza, le obliga a voltear su mirada húmeda en la almohada que comparte y se maldice antes de darle la razón.

  11. Tengo un Súper-poder.

    Devuelvo la vida.

    Como todo Súper-poder que se precie, tiene truco. Con cada vida que renace de mis lágrimas durmientes, la mía se acorta un poco. ¿Cuánto? No lo sé…

    Sé que mi Súper-poder se ha activado, cuando despierto y siento esa extraña sensación. Una mezcla de placer, felicidad, plenitud, armonía…Le caben muchos adjetivos y todos le caben bien así que, para resumir, la he definido como la Súper-Sensación.

    Esta mañana la he percibido, rodeándome Tan densa que casi la podía tocar. He sabido que , en mis sueños, he recorrido lugares y sentimientos y que he recuperado una vida.

    También he oído ese extraño “click” interior que sé que me descuenta… algo. ¿Un segundo, un minuto, una hora? ¿Un día? …

    No quiero pensarlo.

    Para distraerme, estoy cosiendo. Como tengo un Súper-poder, me estoy haciendo una capa de súper héroe. Estoy bordando las letras “SP”, en un color plata brillante.

    Espero que me dé tiempo a acabarla. Me está quedando preciosa…

    • Guau, qué imaginación. La única parte que mejoraría son las sensaciones, me gustarían cosas más concretas, un hormigueo de pies, cosquillas en el esternón, no sé… Suerte con la capa.

  12. Tu ausencia golpea mi ventana húmeda de lágrimas, mientras yo simulo dormir para no escucharla, abrazada a tu adiós y a tu recuerdo, sufriendo esa muerte que no me muere, pero, que sí me mata…

  13. Sueños de libertad
    Procuro tragarme las lágrimas, pero acaban empapando mi almohada, en silencio. A veces sueño que me levanto despacio, tomo mis zapatos sin que se enteren los tuyos, paso de puntillas junto a Toby con el temor de despertarlo, abro la puerta sin ruido, me calzo en el jardín, la hierba enmudece mis pasos y alcanzo la verja de la entrada, y no chirría al dejarla atrás; cuando corro por las calles desiertas, el sonido de mis pisadas suena a libertad. Al final de la calle, una mano amiga me está esperando para esconderme de ti. Cuando despierto, solo encuentro el recuerdo de tus puños en los moratones de mi cuerpo. La mano ha desaparecido y yo no me atrevo a tender la mía al vacío para pedir ayuda.

  14. MATERNIDAD
    Una estrella fugaz se desprende de sus ojos en un llanto que rompe la noche para iluminar los recuerdos tatuados en la memoria. Envidia al animal que tiene lo que a ella la naturaleza le ha negado. Busca la imagen de un hijo pero solo encuentra la
    soledad, que la mira huraña desde la foto que marca el último capítulo del libro de su vida. Sueña una luz de esperanza y extiende su mano para aferrarse a un deseo que no será cumplido.

  15. Rumba catalana
    «Nena, que no seré Peret, pero delante de mí no llora una mujer en la Barceloneta» y saqué la guitarra para cantar una rumbita. Sentada sobre la arena, con las rodillas contra el pecho, me sonrió triste. Siguió llorando mientras mis dedos saltaban de compás a compás. Cuando acabé con un «trán-trán-tratratrán» alegre, se levantó, me beso en la mejilla y dijo: «Mire donde mire, solo lo veo a él».
    Una lagrima cayó en mi guitarra.

  16. Te lo ruego

    Solo la lluvia, la noche y el silencio
    Nadie ha venido. Despierta.
    He imaginado un rayo de energía que nos unía.
    Porque seguimos solos, esperando,
    nuestros cuerpos desnudos, muertos frente al espejo.
    Nada hay peor que la duda,
    nada duele más que el desasosiego.
    Despierta.

  17. Desolación

    A veces, cuando llega la noche y consigue atrapar al sueño, el dolor deja de atenazarla y de enroscarse en su vida. Es entonces cuando emite un suspiro que contiene todos sus anhelos y que se transforma en un diminuto rio de plata. Desafiando todas las leyes físicas recorre el mundo, perfora la atmosfera, zigzaguea por el espacio bailando entre las estrellas y sin descanso se dirige hacia los confines del universo. Allí, igual que un equilibrista insensato, se balancea en la línea fugaz que separa la Vida de la Nada y durante horas emite un gemido lastimero llamando al amado que puede aliviar el dolor. Nadie responde, la Muerte es la reina de la Nada y es una amante posesiva y cruel.

  18. LAGRIMAS DE COLORES

    Realizaron un viaje a Canadá justo en el año 2555, tuvieron un accidente y cuando ella recobro la consciencia, mi padre no estaba.

    Ese día fue el mismo que quedo a oscuras gran parte del nordeste de Noruega a causa de una aurora boreal.

    Mi madre, mientras lo buscó, pasó largo tiempo bajo la exposición de ese fenómeno lo cual resulta extremadamente dañino.

    No se logró recuperar el cuerpo de mi padre.

    Nací a los pocos meses y no hubo resultados alarmantes durante el embarazo para ambas e igualmente en mi nacimiento y posterior desarrollo, todo fue normal.

    Cuantas veces he oído contar lo mismo con su sonrisa de satisfacción, tu padre sigue vivo y siempre está en contacto con conmigo y por ende contigo.

    Tranquila, Lara, todas las noches estoy con él, yo te contaré cuanto hablemos y lo mucho que te quiere, te aconsejara a través de mí y te haré conocerle.

    Con esta historia me crié y excepto con esta “extraña” desaparición de mi padre, mi vida fue normal en todos los sentidos.

    Ahora tiene 55 años, lleva más de seis meses sucediéndole y no consigo acostumbrarme.

    Nunca antes durmió la siesta, procuraba acabar lo mas cansada posible la jornada y así dormir a una hora temprana.

    Aquel día recibí de la clínica los resultados del diagnóstico sobre lo que “aqueja” a mi madre. Sostuve el sobre, mientras, sentada en la biblioteca dirigí la mirada al jardín y distinguí el halo de luz de múltiples colores que expandía una lágrima recorriendo su mejilla. Esta lagrima llegó a la tierra y lentamente quedo absorbida. Sólo sucede, cuando duerme profundamente la siesta.

    Lleva más de seis meses ocurriendo y no consigo acostumbrarme. Me hipnotiza por completo.

    Bien, no lo demoro más y abro sin tener claro mis sentimientos, pues no esta desmejorada, cuando despierta no recuerda nada y desaparece por completo el halo de luz. Siendo de nuevo, mi madre, satisfecha, tranquila y con un rostro muy dulce.

    Encuentro el chip y un detallado informe, lo introduzco en el reproductor y antes de darle a iniciar, leo muy por encima : los consabidos saludos etc. y que voy a presenciar exactamente el sueño que tiene mi madre y luego un dossier explicativo

    Ellos, ya le dan una denominación con un tecnicismo grandilocuente, -noto que me enoja- .

    Le doy a reproducir:

    pues personalmente yo también lo diagnostiqué, y me gusta más el mio: » lágrimas de colores» –

    Según terminó la ultima imagen fui rápido a hablar con mi madre, le conté, le pedí: Mamá cuéntame por favor, algo que intuyo pero no llego a imaginar, hay una explicación lo sé, dímela, mamá por tu mejilla se deslizan unas lágrimas de colores, he visto tus sueños… habla.

    Mi madre, le encontró ese mismo día, atrapado y muy mal herido. Sí, en aquella casa extraña, sin tener como ayudarle, viéndole despedirse de la vida, se acurruco a su lado. Ya vencida por el sueño una furtiva lagrima se desprendió.

    Pasado un tiempo impreciso, se cogieron de la mano, estaban «vivos» y él le contó muchas cosas que había visto y escuchado de otras personas que también estaban allí, mientras la calmaba le dijo punto por punto lo que tendría que hacer y decir hasta el día en que ambos volvieran a estar juntos toda la eternidad, de momento sería cuando ella durmiera, más adelante cuando Lara estuviese preparada para su marcha y para saber la verdad, se reunirían sin separarse nunca más y lo más probable es que su hija tuviera lagrimas de colores.

    Autora
    tRamos

    • PIDIENDO , disculpas a Todos, no hay manera de que aprenda a subir los videos tan estupendos que pones Fernando , asi que hice una pequeña adaptación para poder publicarlo en mi blog, y si no quede agusto , por ultimo trato de poneros el enlace de música como sugerencia y nada que tampoco.

      Besos a todos y gracias por vuestra paciencia

  19. El mejor amigo

    Me ofreces una de tus lágrimas como cebo y allá que me voy. Olfateo tu premio por las calles, rebusco en tenebrosos rincones, bajo a buscarlo a las cloacas de los tuyos, por aquellos barrios por donde ya no entra casi nadie. Camino, camino durante horas. Cuando por fin te lo encuentro le entrego tu mensaje. Acaricio su mano, como sé hacer, para que me siga, para poder traértelo, para colmar tu deseo, para despertar la vida en tus venas, ni que sea por un instante, mientras yo me vuelvo a tender a los pies de tu cama esperando que un día te des cuenta, que nadie te querrá como yo.

  20. Cuando duermo, siempre, me pasa lo mismo.
    Me concentro, me escapo, te busco y te encuentro.
    Te reanimo.
    Mi alegría es infinita hasta que, como siempre, te pasa lo mismo.
    Te mueves, te levantas, te dispersas, te escapas y te pierdo.
    Así que me altero, me despierto, me devuelvo mi vida y tú caes. Y mi lágrima retorna triste y confundida a mi alma.
    Entonces, despierta, tibia y temblorosa, me doy la vuelta y me aferro a la almohada.
    Cierro los ojos y me concentro.

    Como siempre, cuando duermo.

  21. Muchísimas gracias a todos por participar en esta propuesta. Lo he dicho antes, pero insisto: me gusta mucho cómo escribís.
    Una última cosa para que veáis hasta dónde pueden llegar las interpretaciones: en realidad, este video se realizó para recordar el atentado de Nueva York del 11S.
    Un saludo y os espero cuando queráis volver.

  22. Si me das la mano

    Créelo o no, me da igual. Dos veces he visto correr esa luz por el pavimento cual rayo de luna cabalgando el negro remolino de Maelstrom. Es la luz, dicen, que una mente que sueña envía a distancias incalculables o próximas, a aquellos que se hallan al borde del precipicio. La primera vez fue en una casa de colonias, estábamos en cuarto curso y… ¿Te lo cuento?

  23. La llorona y la felicidad.
    Escapó sin mirar atrás. Había sido maltratada demasiado tiempo, no quedaba nada de su esplendor inicial, y decidió alejarse aprovechando el escaso aliento que conservaba. Recordaba el día en que llegó y la instalaron a vivir con aquella desconocida. La portó su dueño como obsequio incondicional a su festejada, ella sumisa y optimista por naturaleza, decidió aceptar el reto. Si se sintió traicionada, no emitió queja alguna.
    El inicio fue extraordinario, la química ardía entre los amantes. Vibró satisfecha durante algunos meses, pero la emoción fue fugaz.
    Le habían contado de la existencia de ese tipo de personas, mastican la realidad engulléndola sin deleite, para luego escupirla deformada y lúgubre. Su nueva ama era de los especímenes más peligrosos y tóxicos.
    Años de quejidos, de lloros lastimeros, de problemas absurdos, de humor apocalíptico, devastaron su ilusión. Decidió abandonarla, huir llevándose consigo a su propietario original. Demasiado tarde, lo encontró moribundo voluntario en un callejón de la ciudad. Solo alcanzó a regalarle un último presente.
    Cuando encontraron el cuerpo, una sonrisa feliz iluminaba el rostro del cadáver.

    Isabel Martínez.
    http://www.tenemosmuchocuento.es

  24. AMOR FURTIVO

    Mi último suspiro se escapó de noche, de puntillas… Queriendo iluminar las palabras nunca dichas, los recuerdos abandonados entre páginas de historias jamas leídas.
    Buscaba en la savia la esencia para tener fuerza de romper la cancela que aprisionaba nuestros besos, nuestros cuerpos… Y así, dejarlos escapar hacia un fuego interminable que nos hiciera gemir hasta la locura una y otra vez, agotarnos y terminar respirando un mismo aliento.
    En ese deseo mi soplo se dotó de alas para buscar entre la niebla y la hojarasca el latir de tus sentidos, el palpitar de una marcha temprana, que aún hoy extraño y no concibo.
    Quizás al morir mi alma despierte de vida la tuya y vuelvas para llorar lo que pudiste amar y dejaste escapar para tu eterno tormento.

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